Cuando Marcela Paz envió Papelucho al concurso de cuentos convocado por la Editorial Rapa Nui, no imaginó que el diario de vida del pequeño Papelucho iba a tener tan buena acogida. Fue publicado en 1947, y permitió a su creadora saltar a la fama. Papelucho es un niño como cualquier otro, con accesos de malhumor y alegría, que se asoma al mundo adulto sin perder una gota de su curiosidad, ingenio y vitalidad.
A esta primera obra siguieron muchas otras, en que Papelucho fue sucesivamente huérfano, hippie, detective, historiador, misionero, enfermo por equivocación, hermano mayor, etcétera. Los diferentes libros sobre Papelucho han sido reeditados una y otra vez en Chile, y traducidos a muchos otros idiomas.
La autora dice: escribió las aventuras de Papelucho pensando
en lo mucho que había sufrido de niña leyendo Oliver Twist, convencida
de que a los niños hay que entretenerlos y educarlos, sin exponerlos a
historias tan tristes.